3. Creación de un nuevo tipo de interacción entre personas y máquinas
Cómo satisfacer las necesidades de la era de la información avanzada (de 1970 a la actualidad)

A finales de la década de 1960, OMRON comenzó a centrarse en el desarrollo futuro de la sociedad, la ciencia y la tecnología. El fundador de la empresa, Kazuma Tateishi, tenía la firme convicción de que la empresa debía tener visión de futuro, además de destreza tecnológica, para seguir evaluando y satisfaciendo las necesidades de la sociedad, y para que Japón se convirtiera en una de las naciones avanzadas del mundo. En 1967 se formó un grupo de estudio para investigar las técnicas de predicción del futuro: así nació la teoría SINIC (Seed-Innovation to Need-Impetus Cyclic Evolution o evolución cíclica de semilla-innovación a necesidad-ímpetu). Esta teoría se expuso en la Conferencia Internacional de Investigación sobre el Futuro en 1970, donde fue recibida con entusiasmo.

En los años 70 y 80, el sector industrial relegó la producción en masa de un solo producto por la producción de gran diversidad y bajo volumen. OMRON se apresuró a detectar la incipiente necesidad de controladores programables que ofrecieran una velocidad de procesamiento alta, con lo que inició el desarrollo de un programador de secuencias para máquinas-herramienta en 1968. A este avance le siguió el exitoso desarrollo de un controlador de secuencias programable llamado “SYSMAC”. Los controladores de secuencias programables de OMRON no solo implantaron un modelo de control programable nuevo, sino que también impulsaron la penetración de la automatización en las fábricas y mejoraron la productividad en el sector industrial de Japón.

En los años 90, la fusión de la lógica difusa y la tecnología de control impulsó el avance de la automatización de las fábricas. OMRON promovió el paso de la inspección manual en la fase final de la producción a la inspección automatizada en línea mediante la combinación de tecnologías de detección y procesamiento de la información. En 1990, OMRON concibió el sistema de visión F300, de uso general, al que siguió, seis años más tarde, la producción del VT-WIN, un versátil sistema de inspección de soldaduras para su uso en líneas de embalaje de placas de circuitos impresos.

En vista de que China, como socio estratégico crucial, está disfrutando de un rápido crecimiento económico, OMRON ha intentado acelerar su expansión comercial en el mercado chino. En consecuencia, OMRON elevó el estatus de su centro de gestión regional de la Gran China a sede regional en 2002. Siguiendo la estrategia de OMRON de reforzar sus instalaciones de producción en China, ese mismo año se creó una planta de producción de componentes electrónicos básicos en Shenzhen, a la que siguió el establecimiento de un centro de producción global de dispositivos de control en Shanghái en 2006. En 2007, OMRON inauguró un nuevo centro de I+D en China para promover la “innovación colaborativa” con socios locales.

Ante el aumento de la preocupación por el cambio climático y otros problemas medioambientales en todo el planeta, OMRON creó en 2009 la sede del área de negocio de soluciones ambientales para entrar de lleno en este negocio. Teníamos grandes expectativas de crecimiento. Junto con el suministro de productos individuales de ahorro de energía, como los dispositivos de control de la energía, los sensores de potencia y los relés de CC, OMRON también se esforzó por promover soluciones destinadas a conservar y generar energía. En este contexto, OMRON introdujo el sistema de visualización de CO₂ “e-watching” y el servicio de consulta mediante la combinación de una serie de dispositivos medioambientales de la empresa. En 2010, OMRON también desarrolló el nuevo sistema de visualización de CO₂ “ene-brain”, capaz de analizar automáticamente distintas áreas para una posible reducción del consumo de energía. Era el primero de este tipo en el mundo.